Las redes 5G ha marcado un antes y un después en la evolución tecnológica. Con velocidades de conexión y una capacidad de respuesta sin precedentes, continúan transformando la manera en que interactuamos con el mundo digital. Sin embargo, dicho avance también trae consigo desafíos, particularmente en el campo de la ciberseguridad para redes 5G. Esto resalta especialmente en un país como México, donde la adopción de tecnologías emergentes está en pleno auge.

En 2025, la ciberseguridad para redes 5G se enfrenta a amenazas cada vez más sofisticadas. El ransomware, la suplantación de identidad mediante deepfakes y los hackeos a dispositivos IoT son sólo algunas de las preocupaciones emergentes. La proliferación de dispositivos conectados —se espera que en 2030 haya casi 30,000 millones, según Statista— amplía la superficie de ataque y aumenta la vulnerabilidad de las redes.

De conformidad con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), la adopción de tecnologías IoT en México está en crecimiento. La impulsa la digitalización y la conectividad masiva de dispositivos. Las organizaciones mexicanas integran cada vez más dispositivos IoT en sus operaciones en sectores críticos como la salud, la energía, la manufactura y las telecomunicaciones. También son cada vez más comunes en las universidades.

Actualmente, 38.9% de las empresas que ofrecen servicios de IoT se encuentran en la Ciudad de México; 15%, en Jalisco; 11.9%, en Nuevo León, y 8.5% en el Estado de México. Esta tendencia subraya la importancia de implementar medidas robustas de ciberseguridad para redes 5G para proteger los datos y la infraestructura crítica. Es crucial, pues el aumento en el número de dispositivos conectados amplía la superficie de ataque y las vulnerabilidades potenciales.

Ciberseguridad para redes 5G, indispensable

En México, sectores decisivos como la educación deben priorizar la ciberseguridad para proteger sus operaciones y datos sensibles. El país registró un promedio de 3,124 ciberataques por semana durante 2024. Ello representa un aumento de 78% en comparación con el año anterior, de acuerdo con Hays. Este incremento subraya la necesidad urgente de implementar soluciones de ciberseguridad para redes 5G robustas y proactivas.

La infraestructura 5G, con su capacidad para soportar aplicaciones de alta demanda como el Internet de las Cosas (IoT), requiere medidas de seguridad avanzadas. Su arquitectura, aunque mejora la conectividad, también introduce nuevas vulnerabilidades que deben ser abordadas con estrategias de seguridad integrales. Es crucial que las organizaciones adopten modelos de confianza cero y autenticación robusta para mitigar estos riesgos.

Palo Alto Networks ha presentado Prisma SASE 5G. Es una solución de seguridad Zero Trust nativa de la nube que aprovecha el poder de Precision AI para establecer un nuevo estándar en la protección de redes 5G. Esta solución permite a los proveedores de servicios ofrecer seguridad sin inconvenientes a sus clientes empresariales. La herramienta mejora la seguridad de los datos, dispositivos, usuarios y aplicaciones en 5G con cambios mínimos en la infraestructura.

Además, Palo Alto Networks ha expandido sus colaboraciones 5G privadas, trabajando con líderes de la industria como T-Mobile, Singtel y NTT DATA. Juntos ofrecen soluciones y servicios de seguridad de extremo a extremo. Estas colaboraciones permiten a las empresas fortalecer la ciberseguridad para redes 5G desde el núcleo hasta el borde. Eso garantiza una seguridad integral en los cambiantes panoramas de red.

La ciberseguridad para redes 5G es un pilar fundamental para el desarrollo digital de México. A medida que avanzamos hacia un futuro cada vez más conectado, es esencial que las organizaciones adopten medidas de seguridad proactivas.