Las empresas de hoy en día recopilan más datos que nunca y este cúmulo de información sigue creciendo a un ritmo exponencial. Esta situación les permite tomar mejores decisiones de negocio, pero también da lugar a nuevos desafíos. Hoy en día se generan mayormente datos sin estructurar u obscuros. Suman del 80% al 90%, según las estimaciones de 2021. La tecnología big data ofrece enormes posibilidades para la educación superior, pero sólo si la información está en un formato para que puede ser analizada y procesada correctamente.

Esto parece un problema destinado a salirse de control para muchas organizaciones. Sin embargo, las nuevas tecnologías de aplicaciones de analíticos y almacenamiento ayudan obtener valor de los datos de una forma cada vez más intuitiva y eficaz.

¿Qué son los datos no estructurados y por qué importan para la inteligencia empresarial?

En esta era digital, casi todas las acciones que realizamos generan datos. Por ejemplo, abrir un sitio web, usar las redes sociales e incluso caminar por la calle con un teléfono inteligente genera datos de GPS. La IoT crece año tras año, a un ritmo que sumará 41,600 millones de dispositivos para 2025. Es fácil ver por qué los datos del mundo se multiplican tan rápidamente.

El desafío del almacenamiento

Datos sin estructurar: cómo aprovecharlos

Algunos de estos datos están estructurados, lo cual significa que tienen un formato específico que se puede procesar fácilmente. Un ejemplo básico de datos estructurados sería una base de datos de usuarios: el nombre, la dirección, el correo electrónico y otros detalles se almacenan en lugares predefinidos.

En cambio, los datos sin estructurar o no estructurados son datos sin procesar sin una organización definida. Normalmente carecen de representación orientada a caracteres y no se pueden consultar mediante métodos basados en SQL. Algunos ejemplos de datos sin estructurar o semiestructurados incluyen publicaciones en redes sociales, mensajes de correo electrónico, documentos, imágenes, videos, audios y otros tipos de archivos.

Los datos sin estructurar crean desafíos de almacenamiento y administración porque vienen en formatos diferentes y no se pueden buscar fácilmente. Si no se clasifican ni administran, pueden llenar rápidamente la infraestructura de almacenamiento. Ello hace que aumenten exponencialmente los costos.

Datos sin estructurar: hay que administrarlos

Datos sin estructurar: cómo aprovecharlos

Las instituciones que están considerando cómo administrar sus datos sin estructurar actuales y planean soluciones de almacenamiento deben considerar varios factores al elegir sistemas e infraestructura:

Capacidad y escalabilidad: ¿Cuánto espacio de almacenamiento necesitas? ¿cómo escalarás tus necesidades de almacenamiento en el futuro?

Rendimiento: Para que cualquier sistema de gestión de datos estratégicos se ajuste a tu propósito, debe ser lo suficientemente potente para admitir la cantidad requerida de usuarios que acceden al sistema simultáneamente y procesar datos mediante la búsqueda o clasificación dentro de escalas de tiempo aceptables.

Accesibilidad: ¿Quién necesita acceso a tus datos diariamente? ¿Tienes diferentes equipos trabajando en todo el mundo? ¿Cómo puedes habilitar un acceso rápido y eficiente a estos equipos mientras mantienes la seguridad e integridad de los datos?

Seguridad y cumplimiento: ¿Cómo garantizarás que tus datos estén a salvo de accesos no autorizados o pérdidas accidentales? ¿Ciertos datos están sujetos a protocolos de seguridad más estrictos que otros datos? ¿Existe una legislación específica de protección de datos?

Facilidad de implementación: Es vital considerar el proceso de creación e implementación de una nueva arquitectura. Esto es, lo que se necesita en términos de nuevo hardware y software y cómo se verá afectada tu empresa durante la transición.

Copia de seguridad y recuperación: El tipo de respaldo más adecuado dependerá de las necesidades comerciales individuales. También es fundamental anticipar posibles pérdidas o filtraciones de datos y contar con un plan de recuperación de datos.

Las organizaciones que dan prioridad a la gestión de datos se benefician de costos de almacenamiento a largo plazo más bajos. Por lo general, experimentan un aumento promedio de los ingresos anuales del 5.32%. Además, tienen un 162% más posibilidades de superar a sus competidores.