La pandemia ha obligado a pasar de modelos de trabajo centralizados a otros distribuidos en distintos espacios. En un abrir y cerrar de ojos han surgido nuevos desafíos. A medida que las cargas de trabajo se mueven hacia el borde, las empresas tienen que reaccionar con rapidez y reevaluar sus agendas. De todas las prioridades, un entorno de TIC ágil se ha vuelto esencial para ayudarlas a adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado y garantizar la eficiencia operativa.

Según IDC, el 65% de las organizaciones han cambiado a un modelo que prioriza lo digital este año. Lo que es más significativo: el 54% de las organizaciones incrementará su inversión en tecnologías que puedan ayudarles a digitalizar sus negocios en los próximos meses.

Sin lugar a duda, un entorno que cambia rápidamente requiere estándares más altos de seguridad, adaptabilidad y flexibilidad en las operaciones y el soporte de TIC. Esto está poniendo el foco en los ecosistemas digitales, Estos permiten trabajar en estrecha colaboración con proveedores de servicios, socios y clientes para crear flujos comerciales eficientes de un extremo a otro y ofrecer resultados comerciales positivos.

Los ecosistemas digitales no son algo nuevo. Han sido un tema popular durante la última década, pero fue la pandemia lo que aceleró aún más la tendencia y su urgencia. Una de las necesidades más comunes de los ecosistemas proviene de las redes. Con las cargas de trabajo acercándose a los usuarios finales, las empresas tienen que ofrecer servicios en cualquier lugar y en cualquier momento. Esto es difícil de lograr si sólo confían en un solo proveedor de servicios. Como tal, las compañías se han vuelto cada vez más críticas cuando se trata de lidiar con la complejidad de la red.

Transformación digital en la nube

Ecosistemas digitales y atención médica

No se trata sólo de la capacidad de ampliar la cobertura geográfica a través de ecosistemas de red. La nueva realidad con operaciones remotas la Internet de las Cosas (IoT) requiere de redes altamente inteligentes y automatizadas. Una red preparada para el futuro debe poder reaccionar instantáneamente para predecir un problema antes de que ocurra. Para que esto suceda, son esenciales la transparencia de las cargas de trabajo y los compromisos en estrecha proximidad con los proveedores de servicios de red. Los proveedores y socios son clave para garantizar que los clientes puedan disfrutar de los mejores servicios en todo el mundo.

Más allá de las redes, los ecosistemas digitales de la nube son otro facilitador importante para que las empresas adopten la transformación digital. Sin duda, la pandemia está impulsando la adopción de la nube a un primer plano, pues permite manejar las cargas de trabajo de una manera más flexible y rentable.

Aquellos dispuestos a dar un paso adelante y pasar a un entorno híbrido de múltiples nubes, pueden disfrutar de las mejores capacidades y ahorros de costos que ofrece cada proveedor. Es decir, optimizar la eficiencia operativa, la seguridad y las inversiones. Esto significa que un enfoque holístico para administrar diversos entornos en la nube con la capacidad de acceder y aprovechar lo mejor de cada solución puede brindar a las empresas la ventaja de acelerar su viaje digital.

Verticalmente, las compañías y los ecosistemas digitales también juegan un papel vital en el avance de las innovaciones de la industria en este mundo postpandémico. En las industrias de la salud y la inteligencia artificial (IA), una infraestructura digital en la que convergen todos los ecosistemas digitales puede ayudar a liberar todo el potencial de los datos.

Ecosistemas digitales para multiplicar valor

Ecosistemas digitales y atención médica

●Inteligencia artificial: Esta área suele involucrar a diferentes partes y cantidades masivas de datos para el aprendizaje automático y la inferencia. La capacidad de procesar y analizar datos en tiempo real y ofrecer información es fundamental para aprovechar plenamente los beneficios de la IA. Como tal, su infraestructura tiene que evolucionar en las dimensiones de ubicación, almacenamiento e informática.

Otro desafío es la seguridad de los datos. Dado que la mayoría de los datos se trasladan a la nube para facilitar las cargas de trabajo, la complejidad de los entornos de TIC hace que las empresas sean más vulnerables a los ciberataques. Es por eso por lo que Equinix trabaja con proveedores de servicios, socios y actores de la industria. El objetivo es crear un ecosistema que ayude a las empresas de inteligencia artificial a construir una infraestructura digital robusta. Al atender las preocupaciones antes enumeradas, pueden enfocarse en cargas de trabajo críticas para innovar a un ritmo más rápido.

Salud: La industria de la salud se transforma hacia una experiencia de paciente omnicanal para mejorar los resultados. Las regulaciones y políticas locales continúan evolucionando en todo el mundo. Por ello, se debe construir un ecosistema que permita comunicaciones seguras e intercambios de datos en tiempo real entre pacientes, socios y proveedores de servicios. Además, la pandemia ha dejado clara la importancia de la colaboración con pares de la industria e instituciones de investigación para acelerar las pruebas y vacunas contra la COVID-19.

Con las tecnologías que nos acercan más que nunca, está claro que el futuro digital es un mundo construido sobre alianzas y colaboraciones. Como empresa de infraestructura digital, tenemos socios para unir empresas y proveedores de servicios en ecosistemas digitales dinámicos. En ellos se puede interactuar y realizar transacciones para multiplicar continuamente el valor para todos.