Impartir una enseñanza en línea exitosa se volvió de pronto forzoso para muchos docentes, debido al confinamiento forzado a causa del COVID-19. Para quienes no están acostumbrados a impartir sus clases en el entorno digital, la transición puede ser complicada. Ello es no sólo por el aspecto técnico (que puede resultar un auténtico desafío), sino porque es una experiencia distinta a las clases presenciales.
Antaño se pensaba que un problema con la enseñanza en línea era permitir que se convirtiera en un curso por correspondencia, sólo que por correo electrónico. Ese riesgo aún existe, pues algunos docentes piensan que los alumnos podrán cursar la materia en línea sin que sea necesaria la participación del maestro. Por ende, diseñan el curso sin tomar en cuenta que el entorno digital moderno llama, sobre todo, a la interactividad multimedia. Para hacerlo con éxito, el primer punto es tomar en cuenta las características del alumnado y estructurar los contenidos de acuerdo con ello. Tal como se hace en un salón normal, pero con distintas herramientas.
Aprovechar el entorno multimedia
●Uno de los primeros puntos a considerar para una enseñanza en línea exitosa consiste en asegurarse de que los estudiantes tengan claro cómo se desarrollará el curso y que se espera de ellos. Un docente habituado a impartir sólo clases presenciales puede pasar por alto que el entorno distinto puede crear confusiones en los estudiantes. Por ello, resulta conveniente que al iniciar el curso se explique en detalle la mecánica a seguir, las fechas de las tareas y exámenes, así como la manera en que se responderán preguntas y darán asesorías individualizadas.
●Hay que ganarse la confianza de los alumnos con una comunicación clara y fluida. Esto se facilita si el docente les permite conocerlo. Para ello, ayuda mostrarse en los videos y, como ocurre en un salón regular, crear cierta empatía. El lenguaje no verbal adquiere más importancia de lo habitual para lograrlo. También es útil valerse de herramientas, como el chat integrado en muchas de las plataformas de transmisión de video usadas en la enseñanza, para responder las preguntas de los alumnos.
●Un entorno multimedia es de gran ayuda para una enseñanza en línea exitosa, pues facilita mantener el interés. Videos en vivo alternados con otros pregrabados, podcasts, libros electrónicos y presentaciones de diapositivas, por ejemplo, estimula su involucramiento con el curso. El uso de herramientas visuales es particularmente recomendable, pues tienden a concentrar la atención de estudiantes acostumbrados a interactuar con pantallas todo el tiempo. Si es posible, proveerlos de contenido pensado para dispositivos móviles (como smartphones o tabletas) resulta ideal.
Enseñanza en línea exitosa: mucha comunicación
●Alternado con lo anterior, resulta útil establecer foros de discusión en vivo, ya sea mediante chats o video (según las posibilidades). Esta manera de crear una comunidad en línea estimula el intercambio de ideas y refuerza el aprendizaje.
●La retroalimentación a los alumnos debe ser ágil y oportuna. Para incrementar su efectividad, el lenguaje utilizado debe ser preciso y claro, inclusive más que en una clase presencial. Tener esto en cuenta favorece la implementación de la enseñanza en línea exitosa.
●Algunos estudiantes se mostrarán reacios a esta modalidad de tomar clases y se resistirán a participar. Puede ser oportuno establecer canales de comunicación para estar en contacto con ellos más allá de las herramientas utilizadas durante las lecciones.