Los ERP son herramientas con gran utilidad para el sector salud. Sus ventajas derivan de la capacidad de concentrar, sistematizar y gestionar toda la información de la clínica o el hospital.
En los hospitales coexisten múltiples departamentos con procesos interrelacionados entre sí. Un sistema ERP puede integrar las operaciones de áreas como admisión, facturación, compras, farmacia, contabilidad, pruebas funcionales, consultas externas y hospitalización. Las ventajas fundamentales de un ERP en el sector público se pueden enumerar como eficiencia, capacidad operativa, control, trazabilidad y competitividad. Esto permite administrar los recursos, actividades y procesos de la institución, además de mejorar la atención de los pacientes, desde el primer contacto hasta el alta.
El tener la información unificada y ordenada permite que cualquier suceso sea notificado de forma inmediata. Esto permite tomar decisiones informadas con rapidez y seguridad. La mejora en los flujos de información ayuda a mejorar la calidad de la atención brindada a los pacientes, pues el personal tiene que dedicar menor tiempo a tareas administrativas y puede enfocar su atención y cuidado de los enfermos. Además, al implantar un ERP en una institución de salud se consigue reducir los costos de mantenimiento y actualización de software, pues se simplifica el pago de licencias.
Opciones para elegir
Hay dos opciones básicas para instalar un ERP orientado al sector salud: en los servidores de la institución o en la nube. La primera requiere de personal dedicado a su manejo y mantenimiento, el cual incluye las actualizaciones de software. La segunda opción presenta las ventajas de la nube, como la escalabilidad, la flexibilidad y la tranquilidad de que las actualizaciones corren por cuenta del prestador del servicio.
Entre los factores que contribuyen a la rentabilidad de esos sistemas se cuenta la eliminación de archivos y documentos impresos: al ser digital, la documentación no ocupa espacio físico y se puede conservar con varias copias de seguridad.
Otro punto importante es la existencia de versiones open source gratuitas de ERP que pueden ser usadas por el sector salud. Aunque no dejan de existir costos añadidos —como la capacitación del personal y la particularización del software—, el no tener que pagar licencias abate en mucho el desembolso.
ERP para el sector salud: dos ejemplos
● Una opción desarrollada en España y con presencia en una treintena de países (México incluido) es el software Hospisalus, de la firma QSOFT. Diseñado por médicos especialistas y directivos de centros de salud, es intuitivo y fácil de usar, con actualizaciones y servicio técnico oportuno. Sus funcionalidades abarcan todas las facetas de la operación de un hospital, como admisiones, urgencias, enfermería, telemedicina y quirófanos. En el aspecto administrativo tiene módulos para la gestión económica, la facturación y mercadotecnia, entre otros.
En lo referente al expediente clínico electrónico (ECE), incluye herramientas para gestionar el seguimiento de la evolución del paciente, controlar las órdenes médicas y las recetas prescritas, la solicitud de análisis y visualización de sus resultados, conla posibilidad de elaborar gráficas de evolución.
● Una opción de ERP open source que puede ser usada por algunas instituciones de salud es OpenXpertya. También originado en España y ya adaptado a los mercados latinoamericanos, su desarrollo tuvo apoyo del Principado de Asturias. Entre sus ventajas se cuenta que existe una gran documentación en torno al proyecto, casi toda en español.
Tiene una arquitectura multicapa: una está diseñada para la interacción con el usuario. Otra está dedicada a la operación del negocio. La tercera se refiere a la integridad de los datos.
Como está programada en Java, se trata de un producto capaz de correr sobre cualquier sistema operativo. Aunque en principio se trata de un software de uso general, se han desarrollado módulos específicos para diversas industrias y verticales, incluido el sector salud.