Ya antes de la pandemia, la Universidad de Xalapa se encontraba trabajando en un modelo académico de educación virtual. Eso abarcó la capacitación y certificación de la plantilla de aproximadamente 230 profesores. La contingencia sanitaria les motivó a modernizar sus procesos en línea, que evolucionaron a su actual ecosistema híbrido EduHUX 4.0. El modelo combina lo mejor de las estrategias de aprendizaje presenciales y virtual. Para ello, la universidad instaló 55 aulas híbridas.
En marzo de 2020 la universidad debió intensificar la capacitación a sus docentes para la educación a distancia. Incluyeron el uso de la plataforma, uso de software, programación y planeación académica y biblioteca virtual, entre otros aspectos. En el proceso, detectaron nuevas necesidades tecnológicas, como ancho de banda, equipos de cómputo, licencias de software. Fue entonces que decidieron diseñar aulas híbridas y equiparlas con cámaras y audio integrado para crear un ecosistema híbrido real.
Eligieron a ho1a Innovación, quien les propuso utilizar las unidades de colaboración Avaya CU360. Los dispositivos brindan acceso fluido y en movimiento a aplicaciones en la nube. Además, tienen capacidad de video. Así, con dicho equipo lograron un ecosistema híbrido apto para estudiantes presentes y virtuales. Hoy la universidad cuenta con 55 aulas híbridas. Entre ellas se cuentan talleres y laboratorios de mecatrónica, ingeniería industrial, arquitectura, diseño digital y periodismo y comunicación. La meta a corto plazo es llegar a 75 aulas híbridas.
Visión de futuro en el ecosistema híbrido
El doctor Rafael Díaz Sobac, director de innovación institucional de la Universidad de Xalapa, afirma: «Un aula híbrida es un ecosistema tecnológico. Avaya es el corazón de ese ecosistema por su facilidad de uso, escalabilidad, su interfaz móvil basada en Android y su adaptabilidad a dispositivos como micrófonos, bocinas, una cámara adicional, conexión a software o a plataformas».
La implementación se llevó a cabo a través de tres fases de ejecución. Su gestión y desarrollo tomó tres meses. La activación final del proyecto se hizo en febrero de 2022. Fue posible gracias a ho1a Innovación, que brinda conectividad al campus tanto en sus áreas administrativas como de desarrollo académico.
La experiencia del usuario por parte de los usuarios, alumnos y docentes ha sido muy buena. En una encuesta, cerca de 2,000 estudiantes (90% de los alumnos) calificaron como “satisfactoria a exitosa” la implementación del ecosistema híbrido. Ahora, los usuarios además de contar con un ambiente de colaboración en el formato que elijan, pueden grabar las clases para ser consultadas posteriormente. «Un aula híbrida tiene tecnología y tiene pedagogía. Tiene planeación y esto es visión de futuro», asevera el doctor Díaz Sobac.