Diferentes tipos de robots tienen aplicaciones en el campo de la salud. Un ejemplo es la industria farmacéutica, en la que los fabricantes pueden obtener ventajas competitivas en productividad y flexibilidad gracias a los robots móviles autónomos (Autonomous Mobile Robot o AMR). Esto se acentúa conforme la automatización en la producción se extiende a la logística.
La tecnología médica requiere un alto grado de eficiencia y precisión en la producción de piezas. Al mismo tiempo, la industria enfrenta retos crecientes debido a la competencia del mercado global y las expectativas en aumento de los clientes. Con el fin de satisfacer las demandas del mercado, es vital producir artículos de alta calidad. Además, se deben elaborar de manera flexible y con un corto tiempo de entrega. Para lograrlo, los fabricantes deben usar sus recursos de manera eficiente y diseñar procesos operativos confiables. Los robots móviles como los de Mobile Industrial Robots (MiR, una firma danesa basada en Odense) se utilizan con frecuencia exactamente para este propósito.
La tecnología dinámica y flexible permite a las empresas automatizar su transporte interno de material de una manera simple.
Las modernas salas de producción se caracterizan por ser dinámicas y ágiles. Los transportes internos se realizan constantemente: los productos semiacabados se llevan del almacén a las líneas de producción, los productos terminados se llevan de las líneas de producción al almacén y los artículos se transportan entre los departamentos. Los trabajadores calificados pasan gran parte de su día simplemente moviendo partes de un punto a otro, y generalmente deben interrumpir su trabajo real para hacerlo, lo que conduce a una parada innecesaria en las máquinas.
Robots móviles y humanos lado a lado
Para las empresas en todas las industrias, esto significa una gran pérdida de eficiencia. Los AMR ofrecen un enorme potencial para optimizar la logística interna. Los AMR son flexibles, fáciles de programar y colaborativos, características que se adaptan particularmente bien a los procesos de producción modernos.
Mientras que los vehículos guiados automáticos tradicionales (AGV) solo se pueden operar con guías montadas físicamente, como bandas magnéticas o rieles, los AMR proporcionan una alternativa simple y rápidamente desplegable. Con sensores y cámaras incorporados y software sofisticado, los AMR pueden identificar su entorno y tomar la ruta más eficiente hacia su destino. Al hacerlo, esquivan obstáculos y personas de manera segura, lo que permite que los robots trabajen de manera segura junto a los humanos.
Los robots de MiR son extremadamente flexibles y, según los requisitos, los pueden equiparse con diferentes módulos superiores, como estantes, cintas transportadoras, brazos robóticos o un gancho capaz de remolcar carros de hasta 500 kilos. Por lo tanto, los AMR se pueden personalizar según las necesidades individuales de la empresa, independientemente de si es necesario transportar entre las líneas de producción piezas pequeñas, como instrumentos quirúrgicos, o componentes de productos médicos más grandes.
Los robots móviles colaborativos a menudo son fáciles de usar y se pueden configurar sin experiencia previa en programación. Conectados a través de WiFi, los empleados pueden acceder sin contratiempos a una interfaz fácil de usar desde cualquier computadora o dispositivo móvil.