El uso de la inteligencia artificial (IA) en la educación superior podría verse muy acelerada el próximo año. El principal motor serán las innovaciones que están cada vez más al alcance de los universitarios. Para charlar lo que puede ocurrir con la inteligencia artificial en 2025, directivos de Dell Technologies y Nvidia se reunieron en el evento AI: El viaje continúa en 2025. Participaron Juan Francisco Aguilar, director general de Dell Technologies México, y Marcio Aguiar, director de la división Enterprise de Nvidia para Latinoamérica. Moderó Kurt Yáñez, de Dell.
Aplicaciones de la inteligencia artificial en 2025
De acuerdo con Aguiar —cuya empresa hace sinergia con Dell para potenciar el desarrollo de la IA—, hizo énfasis en la necesidad de capacitar a los futuros profesionistas. El objetivo es prepararlos para aprendan —incluso desde antes de ingresar a la universidad— a utilizar la IA con soltura y eficiencia.
Por su parte, Aguilar destacó otra tendencia de la inteligencia artificial en 2025: el uso de asistentes virtuales para tareas administrativas en servicios escolares. «Gran parte de ese departamento se dedica a responder dudas, preguntas y quejas de los estudiantes y profesores. Diversas pruebas muestran que los asistentes virtuales pueden resolver más del 95% de los casos. Eso libera al personal para dedicarse a otras tareas», señaló.
Agregó que las nuevas computadoras de Dell están preparadas para aprovechar el potencial de la IA. Dado que incorporan unidades GPU para procesar cargas de trabajo de IA, pueden utilizarse en numerosas tareas. Indica que, en conjunto con Copilot (de Microsoft), ya se utilizan para procesar información y generar reportes, documentos, promociones. «Literalmente de todo. Esa es una aplicación real que ya vemos ahora», abunda.
Huelga decir que Aguilar también prevé que se ampliarán las aplicaciones de la inteligencia artificial en 2025 en los laboratorios universitarios. Eso será especialmente provechoso en los dedicados a la investigación avanzada.
Por su parte, Yáñez apuntó que un uso más amplio de la inteligencia artificial en 2025 potenciará el aprendizaje personalizado. «Los asistentes permiten brindar experiencias educativas particularizadas a la medida de las necesidades individuales de cada estudiante. Y no sólo se limita a los contenidos: también puede adaptarse al estilo de aprendizaje de cada uno, ya sea visual, auditivo o kinestésico, por ejemplo», aseveró.
Más predicciones para este año
Por su parte, en un panel virtual, otros directivos de Dell presentaron su perspectiva de lo que ocurrirá con la inteligencia artificial en 2025. Participaron John Roese, director global de tecnología y director de IA de la empresa, y Luis Gonçalves, presidente para América Latina de la firma. El panel lo moderó Ana Oliveira, directora senior y jefa de la oficina de IA en Brasil.
Las cinco predicciones sobre inteligencia artificial en 2025 y más allá son las siguientes:
●Los agentes de inteligencia artificial transformarán la interacción entre humanos y tecnología.
●La IA empresarial pasará de ser un concepto a una realidad.
●Se fortalecerá la IA soberana: cada nación dará forma a su propio futuro digital.
●El poder de la IA se extenderá conforme se integre con la computación cuántica, las redes 6G y la seguridad de confianza cero.
●Se volverá imprescindible tener fluidez en el uso de la IA.
●Interacciones transformadas entre humanos y tecnología. Entre lo que vendrá en materia de inteligencia artificial en 2025 destaca la colaboración entre humanos y máquinas mediante agentes. Los agentes son sistemas informáticos capaces de planear, tomar decisiones y actuar para alcanzar objetivos predefinidos. Hoy la IA generativa (GenAI) ya los utiliza. De hecho, se prevé que surjan sistemas multiagente.
En los siguientes años no sólo mejorará su capacidad de entender el lenguaje natural; también podrán realizar tareas técnicas como escribir código y revisarlo.
En temas de ciberseguridad podrán apoyar en la detección de fraudes, así como detectar y responder a amenazas en tiempo real.
Usos en el mundo real
●La IA empresarial pasará de ser un concepto a una realidad. Otra cosa que pasará con la inteligencia artificial en 2025 es que se podrá escalar desde la conceptualización hasta la integración total en procesos clave. Para maximizar la eficiencia, las organizaciones —incluidas las universidades— deberán adoptar un enfoque holístico. Esto es, tendrán que prepararse ejecutar cargas de trabajo en un entorno de datos altamente distribuido. Dicho entorno abarcará el equipo en las instalaciones, la computación en el borde, las PC habilitadas para IA y, por supuesto, la nube.
La IA y los motores de orquestación ayudarán a equilibrar costos, la disponibilidad de energía, la latencia, la seguridad y los requisitos de arquitectura.
●Se fortalecerá la IA soberana. Se trata de la capacidad de una nación para aprovechar la IA utilizando su propia infraestructura y sus datos. Para ello deben diseñar un ecosistema alineado con la cultura, el idioma y la propiedad intelectual locales. De acuerdo con John Roese eso ocurre «a menudo con una fuerte colaboración entre los sectores público y privado».
La IA soberana facilita proteger la infraestructura crítica, acelerar el crecimiento económico y aumentar la competitividad global. Eso permite perfeccionar los servicios públicos, la movilidad urbana, la planeación urbana, la gestión de desastres y la sostenibilidad.
«La IA puede mejorar los servicios públicos, la movilidad, la planeación urbana, la educación en todos sus niveles, los desastres, la gestión y la sostenibilidad», aseveró Gonçalves.
Inteligencia artificial en 2025, fortalecida
●La IA se potenciará al integrarse con otras tecnologías. La IA ampliará su impacto al integrarse con otras tecnologías emergentes como la computación cuántica, el borde inteligente, la seguridad Zero Trust, las redes 6G y los gemelos digitales.
En particular, la combinación de la IA y la computación cuántica revolucionará sectores clave, como la educación superior. Se conseguirá la potencia de procesamiento necesaria para resolver problemas que la computación tradicional no puede abordar con tanta eficiencia, como los enfrentados en muchas investigaciones avanzadas que se realizan en universidades.
●Fluidez en el uso de la IA. Se prevé que la inteligencia artificial en 2025 será cada vez más indispensable en todas las profesiones e industrias. Esto abarca, por supuesto, la educación superior. En consecuencia, se transformará el mercado laboral. Por ende, se requiere cada vez más fluidez en el uso de la IA. Así, los profesionales deberán ser capaces de centrarse en las funciones estratégicas, el pensamiento crítico y la resolución avanzada de problemas.